La Unión Europea se ha fijado dos objetivos ambiciosos: reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en al menos un 55% para 2030 y ser climáticamente neutro para 2050, con cero emisiones netas de CO2. La descarbonización de la industria de la UE es uno de los principales retos que deben superarse para conseguir este objetivo.
En este sentido, Saint-Gobain firmó en mayo de 2020 el compromiso del Pacto Mundial “Ambición empresarial para 1,5°C”, comprometiéndose a alcanzar emisiones netas cero antes de 2050 en línea con el objetivo de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5°C. Esta ambición forma parte de la estrategia que el grupo viene desplegando desde hace varios años para limitar su impacto ambiental y contribuir a descarbonizar sus mercados.